Páginas

domingo, 28 de septiembre de 2014

Capítulo 1.

01 – “El lugar donde todo comenzó”

Lali.


Mi cabeza estaba solo un poquito confusa a causa del alcohol. Mis piernas parecían de goma, como si yo ya no tuviese por completo el control de mi cuerpo.


— ¿Vamos a buscar algo más para beber? —Gritó Malena, intentando que la escuchara por sobre la música.


Rápidamente negué con mi cabeza —No puedo. Me voy a poner enferma.


—Demonios, casi olvido que me conseguí una amiga con muy poca tolerancia al alcohol —Ella se estaba riendo histéricamente de mí.


Sacudí desdeñosamente mi mano, restándole importancia al asunto —Tú ve a la barra a conseguirte algún trago con nombre raro, yo voy a estar afuera. Creo que necesito un poco de aire.


Tras rechazar amablemente a un par de chicos borrachos como la mierda, recibir varios pisotones y empujones, logré llegar a la puerta que daba justo con el jardín.
Era muy raro que se organice este tipo de fiestas aquí. Generalmente, los padres suelen ser lo suficiente inteligente como para permitir que su casa termine destrozada; claro que siempre existe la posibilidad de que ellos tengan que salir de viaje, y eso siempre es la excusa perfecta para tener alguna fiesta.


La gran piscina se encontraba a unos metros de la casa, y el ruido de la música ya no se escuchaba tan fuerte como segundos atrás.


Me quite los zapatos y las medias bucaneras, para luego poder sentir el frescor del agua en mis pies.


Se sentía raro estar en una fiesta sin Rodrigo, bueno, en realidad se sentía raro no tenerlo a Rodrigo fastidiando mi noche. Aunque no lo quisiese admitir, realmente lo estaba comenzando a extrañar. Quería tenerlo otra vez en mi casa las veinticuatro horas del día.
Me sonreí a mi misma por lo patética que podía llegar a ser, durante todo el año estaba quejándome por tener que soportar a mi mejor amigo prendido como un chicle de mi, y ahora que no está conmigo estoy a punto de llorar como una niña pequeña.


— ¿Se puede saber que hace una chica como tú sola?


Ahogue un jadeo de sorpresa. Una silueta masculina apareció a mis espaldas irrumpiendo mis pensamientos. Tenía hombros anchos y a través de la camiseta se notaba que estaba bien torneado. Era alto, probablemente medía 1.87. Sus grandes ojos brillaron con diversión y yo me ruborice como una loca al darme cuenta que lo estaba observando detenidamente. 

—Podrías sacarme una foto, esas duran más —Me dio una insolente sonrisa al tiempo que me guiñaba un ojo.

—Generalmente me gusta sacar fotos de cosas que me parecen atractivas y, definitivamente, tú no apareces entre una de ellas.

¡Ja! Toma eso Sr. Creído, estoy segura que eso debe haber dejado dañado a su bonito ego.

Se encogió de hombros, ignorando mi mirada fulminante. Arrastro su culo a mi lado, acomodándose sobre el césped.

—Es una lástima que no te parezca digno de una foto, yo si te sacaría una a ti. Aunque, pensándolo bien… —entorno los ojos y se froto la mandíbula, simulando estar pensando en algo realmente importante —creo que saldrías mejor en una foto sin ropa.

Saco de sus bolsillos del pantalón unos cigarros ya preparados.

— ¿Quieres uno?

 Negué repetidas veces con la cabeza, al tiempo que me debatía internamente entre ir a buscar a Malena o quedarme con el desconocido unos segundos más.

Lo único que cortaba el silencio era el sonido lejano de la música y las caladas que le daba a su cigarro.

—Me gusta tu carácter. Es… muy tuyo.

Esboce una pequeña sonrisa, mientras que movía mis pies al compás de la melodía que tarareaba. —No sé si tomarme eso como un halago o una ofensa, por lo que me lo tomaré de la primera manera. A casi nadie le gusta mi carácter.

—Eres la primera chica que lastima a mi ego a los segundos de conocerla, supongo que algo especial debes tener, ¿o me equivoco? Y eso sin contar que tampoco me reclamaste nada. Podrías llegar a ser una compañía agradable.

Suspiré divertida y me levante, sacudiéndome con las manos los shorts.

—Es una lástima, mi compañía acaba de terminarse por esta noche.

—Mi nombre es Juan Pedro, pero me dicen Peter. —Se irguió delante de mí, sacándome así alrededor de dos cabezas de altura. —Soy nuevo por estas zonas, ¿qué te parece si me ayudas a conocer un poco mejor el pueblo?

—Estoy segura de que encontrarás una mejor guía turística que yo, y en especial alguna que no tenga problema en enseñarte su dormitorio. —Levanté mis zapatos y comencé a caminar de vuelta a la casa. —Pero ten cuidado, hay quienes dicen que se escuchan ruidos extraños en la noche, ya sabes… todas esas leyendas de que en pueblitos tan chiquitos siempre ocurren cosas raras. —Le guiñe un ojo juguetonamente y apresuré mi paso.


—Ya nos volveremos a ver. —Gritó Peter al tiempo que levantaba su mano en el aire, con una sonrisa bailando en su rostro. 
____________
He vuelto oficialmente al blog♥ ¿Notaron que ahora es como que el carácter de Lali esta más maduro? Ahora ya si se sabe defender u.u En esta novela si me esta gustando como van quedando los personajes, no como me paso con la primera versión:( Bueeno, nos leemos pronto (seguramente que entre lunes o martes) y espero que hayan disfrutado el primer capítulo 
Yami

7 comentarios:

Nuestro lugar... TU lugar!